¿Cómo no me iba a enamorar de vos?

Acordarme de todas y cada una de las sensaciones que me generan estando arriba de un escenario. Escuchar una canción y recordar la primera vez que fue en vivo, con la misma euforia y el mismo sentimiento. Saber que, aunque duela cada vez que nos despedimos, el próximo encuentro no va a tardar mucho en llegar. Escribir y tener sabido que, en parte, es gracias a ustedes, porque son mi inspiración, mi motor, mi soporte, mis ganas de seguir. Haber conocido gente tan linda por ser parte de esta locura inmensa que a más de uno han de transmitir. Reír al escuchar las anécdotas infinitas del gordo y sus mambos en una que otra entrevista. Sentir cada recital como si fuese el primero, con las mismas ganas, el mismo entusiasmo, la misma pasión.
Describirlos, siempre que me preguntan,

como lo más lindo que tengo en mi vida.

Gritar y quedarme sin voz cada vez que voy a verlos. Llorar de emoción con sus canciones, y con toda esa gente hermosa que deja su alma en esos encuentros. Bancarse el hecho de tener que protestar, a veces, por no poderlos ir a ver todas las veces que quiera. Pero igual hacerles el aguante, desde donde sea, siempre. Aprender todos los días algo nuevo, aunque parezca mentira. Es creer o reventar, pero me enseñaron tantas cosas en éstos años... Palpitar cada víspera como si fuese la última, manija al cien por ciento, y que una vez llegado el momento, no querer que termine nunca. Levantarse de los bajones anímicos escuchándolos, nada más que eso. Y volver a ser feliz.
Cargarme de energía después de cada show, de esas noches donde entiendo que ser parte de esto, es lo mejor que pudo haber tocado mi vida.
Defenderlos a rajatabla si de ustedes se trata. Que nadie venga a decirme que ustedes no son música, que ustedes no se merecen estar donde están hoy. Porque todo lo que se ganaron, lo tienen bien merecido muchachos.
Insistir en que de verdad, son lo más lindo, lo más valioso, lo más puro y real que tengo.
Agradecer a lo que sea que nos vigile y nos mande cosas desde arriba, por presentármelos y haberme enamorado así. Explicar todo esto, y tener todavía un sin fin de cosas por nombrar, pero que son más lindas sentirlas que expresarlas.

Llegó el día, mi genio amor...

- Tu amor y mi lealtad, contra viento y marea -

Que se hayan inventado LAS PASTILLAS DEL ABUELO.